En ese contexto, América Latina se torna importante como objetivo de alianzas estratégicas. Para Roett, es evidente que el intercambio con esta zona ya no es un atributo exclusivo de los Estados Unidos de América, sino que el continente del sur se ha abiertonuevas opciones políticas y económicas.
A pesar de que China ha construido una importante presencia en los mercados africanos, ahora parece apreciar las ventajas de América Latina. En ese sentido, afirmó que Brasil se presenta como un aliado estratégico de vital importancia para acceder al continente, condición que sería valorada de igual manera por los Estados Unidos.
En es sentido, comentó que la acogida popular a las visitas de Estado en Latinoamérica, suele ser más cálida hacia los representantes asiáticos que hacia Estados Unidos, situación que se debe principalmente al rechazo que provocan algunos altos representantes del gobierno del éste último país y a su política exterior.
El académico afirmó que China está viviendo un importante crecimiento económico, pero también se está expandiendo en cuanto a seguridad. A pesar de su optimismo, le es difícil asegurar cuánto se demorará el país asiático en llegar a ser una superpotencia, aunque confía en que será pronto. A diferencia de él, Martín Pérez Le-Fort, director del Centro de Asia Pacífico del Instituto de Estudios Internacionales de la Universidad de Chile, considera que la estabilización de China como superpotencia no se verá en este siglo, sino que respetará la lógica de desarrollo oriental, tomando varias generaciones de plazo.
Para el académico norteamericano, una de las mayores incertidumbres con respecto a la posibilidad de que China se convierta en una superpotencia, no se refiere tanto a los plazos que esto lleve, sino a la capacidad de sostener un liderazgo mundial basándose en una administración política poco democrática, sobre todo considerando que la experiencia de Estados ha demostrado lo difícil que es imponer el sistema democrático en sociedadesdiversas.
Con respecto a las perspectivas futuras, Roett afirmó que el gobierno de los Estados Unidos se concentró durante demasiados años en Irak y las amenazas externas, dejando de lado los temas internos como educación y salud públicas. Para el académico es evidente que estos tópicos deberán ser retomados con prioridad en la próxima administración, dejando parcialmente de lado los asuntos externos.
