Claude Pomerleau:

"El liderazgo de la Iglesia como actor global está en serio déficit"

"El liderazgo de la Iglesia como actor global está en serio déficit"

De sonrisa amable y palabra fácil, a Claude Pomerleau parece resultarle natural la increíble multiplicidad de sus roles. Profesor, cientista político, sacerdote, consejero parlamentario, clarinetista, ex rector de colegios y teólogo, quizá no es más que un dedicado observador del mundo que no puede evitar el razonamiento y la acción como respuesta a todo lo que le ofrece la vida.
Desde su más íntimo origen, parece haber sido predestinado a la diversidad. Norteamericano, de padres canadienses con ascendencia francesa, estudió en Europa y reconoce un especial cariño por América Latina, en general, y Chile en particular. Sus proyectos, tan múltiples como variados, parecen abrirle caminos extraños y sugerentes, y él parece dispuesto a transitarlos todos al mismo tiempo.
Pudimos conversar con este multifacético académico, que ha participado como Profesor Visitante del IEI desde la década de los '70s, justo antes de emprender su más reciente aventura en la Universidad de los Mártires Ugandeses, África.

Claude Pomerleau

Suena interesante su nuevo proyecto en África, ¿de qué se trata específicamente?

Bueno, el proyecto mío en África es una cosa amplia. Parte del proyecto es mi conexión con el Instituto de Estudios Internacionales, porque estoy trabajando con el director Morandé para establecer un convenio entre el Instituto y la universidad de Mártires Ugandeses, la UMU,que es la universidad donde voy a ir a trabajar el año próximo como profesor de Ciencia Política. Y esa es la otra parte de mi proyecto, que es apoyar una universidad nueva, que tiene recién 16 años de edad, y es la universidad de los obispos de África del Este, entonces, abarca principalmente Tanzania, Uganda y Kenia, que es la parte cerca del Lago Victoria, donde empieza el Nilo, que es un centro bastante importante para la historia del África.

¿Cómo se le ocurre partir hacia allá?

Decidí ir para allá porque mi congregación, la congregación de Santa Cruz, que tiene el colegio Saint George, y que esta hace medio siglo trabajando en Chile, quiere desarrollar un programa de educación superior en África del Este. Por eso pidieron a algunos de nosotros para empezar a enseñar en la Universidad. Somos profesionales, profesores de la universidad, que me incluye a mí de Portland, un profesor de Notre Dame, y algunos ugandeses que ya están terminando sus estudios. Entonces, vamos a establecer como un núcleo de la congregación en la Universidad y también ayudar a mejorara el nivel académico y también residencial...

¿Residencial?

Si, porque es una Universidad residencial, lo que nosotros tenemos como muy importante, y tenemos mucha experiencia con eso. Tenemos siete Universidades en los Estados Unidos, todas residenciales. Pensamos que una Universidad, si es posible, puede ofrecer también una educación mucho más completa que lo que puede entregar solo el instituto. Hay muchos temas para formar la persona en distinto nivel. Entonces, eso es mi interés para el futuro: ir a África, a Uganda, y trabajar allá un año.

Tratando de sintetizar lo diverso de sus estudios, ¿podría definir el rol de Dios como actor internacional?

Bueno, Dios trabaja a través de sus criaturas, así es que mi descripción del papel de Dios es el de sus criaturas. La Iglesia Católica, como todos los actores no gubernamentales en el plano internacional, tiene diferencias importantes según el lugar de donde hablemos. Hay una Iglesia de América Latina, con características comunes, pero con grandes diferencias, la Iglesia Católica de Chile no es la de Méjico, y la de Guatemala no es la de Brasil. Al mismo tiempo está la Iglesia Católica en los Estados Unidos, o en Canadá, o en Europa, o en África, donde voy a ir, y son todas muy diversas. Entonces, lo que a mí me fascina de este actor transnacional, es que es una combinación, es el único actor transnacional tan grande y tan fuerte (porque tiene muchos años de trabajo y más de mil millones de personas que hacen parte de en esta Iglesia), que trata de influir en el nivel de ideas, de fe, de valores, tanto como en la acción social. En el mundo hay muchas transnacionales que hacen trabajos para influir en la política, la distribución de ingresos, etc., pero hay pocas organizaciones con el fin de cambiar el espíritu y la manera de pensar.

¿Cómo está funcionando esa institución hoy día?

Eso depende del sector, de la región. Yo puedo hablar de los Estados Unidos, que es mi país, y diría que está mal, muy mal, con defectos severos y con un liderazgo muy débil.

¿Por qué?

Con la muerte de Juan Pablo II, la Iglesia ha entrado en un déficit, esta casi estancada. El Papa nuevo es un hombre intelectual que esta preocupado de una sola parte de esta Iglesia, que es su doctrina, y que es importante, pero Dios trabaja a través de Políticas Sociales, y la Política Social ha cambiado mucho más rápido, de manera mucho más dramática que lo que la doctrina puede entender. Hay que trabajar en las dos simultáneamente, Juan Pablo II era un hombre mucho más apropiado para una Iglesia que esta buscando un nuevo camino. Entonces, creo que el liderazgo de la Iglesia como actor global está en serio déficit. Qué significa, espero yo, que se van a despertar los obispos en un liderazgo regional. Yo veo un problema en África muy serio, los obispos son muy tímidos, y no están recibiendo una dirección, una visión desde el Vaticano, entonces están quietos.

Tiene trabajo entonces...

Bueno, ésta es una muy buena oportunidad de estar allá y bailar, hacer cosas, me gusta, es que este trasnacional funciona solamente si sigue trabajando, y buscando, y reinterpretando todos sus objetivos al mismo tiempo, y el objetivo de este transnacional es la Acción Social, es cómo actúan las personas en el mundo, y cómo viven sus valores. Y eso está relacionado con la doctrina, por supuesto, pero yo veo el liderazgo central fallando mucho. En mi país, en los Estados Unidos, el tema de pedofilia ha sido terrible, y los obispos no han entendido cómo ha dañado a esta organización, seriamente, y piensan que salvar el poder político de los obispos es más importante que resolver la cosa de fondo.

Pero en Chile, la Iglesia Católica demuestra constantemente su influencia...

Yo creo que la Iglesia en Chile siempre ha sido una Iglesia mucho mas avanzada, más abierta, quizá por ser una Iglesia más chica, no sé, más fácil de maniobrar. El tamaño representa mucho, la Iglesia Católica en los Estados Unidos es mucho más grande, casi 300 obispos. Entonces aquí es mucho más fácil decir: "ya, esta es la dirección que tiene que tener la Iglesia en general", espero que [Alejandro] Goic y los otros obispos puedan estimular un poquito, dar una patada a las autoridades de arriba y decir: "¡señores!". Porque acá hay discusión sobre los cambios necesarios, sin duda Roma quiere suavizar y disminuir los conflictos, y los obispos se encuentran en una situación muy complicada, pero están tratando de aplicar cambios que han mejorado algunas cosas. Sin duda, las comunidades de base han sido una de las grandes contribuciones a la Iglesia de América Latina, negar eso es estúpido. Yo admiro mucho a la Iglesia en Chile, creo que es una Iglesia que es modelo, igual como lo es la economía de Chile, la Iglesia de Chile es un ejemplo muy importante pare el resto de América Latina.

Volviendo a lo internacional, un tema valórico que ha estado muy presente en la agenda es el del Medio Ambiente...

Creo que lo fuerte de este tema ha sido la combinación de valores de vida, de la calidad de vida. El Medio Ambiente es el aire que respiramos, es el agua que tomamos, es la fruta que comemos, el mar que gozamos, entonces, el tema es al mismo tiempo muy comprensivo, muy enorme, y al mismo tiempo muy preciso, y el problema es que nadie quiere pagar el precio para mejorar el Medio Ambiente.

Todo es un problema económico...

¿Te das cuenta lo que va a ser mejorar el aire de Santiago? Yo sufro de asma, y hay una contaminación horrenda en esta ciudad, igual en los Ángeles y otras ciudades en los Estados Unidos, ciudad de Méjico en Distrito Federal, pero el costo de hacer cambios es enorme, y es un costo sólo para mejorar el Medio Ambiente inmediatamente, lo más urgente, más allá de eso, la cosa del calentamiento del globo y los problemas que eso va a producir es mucho más complicado, muy difícil. Yo pienso que es obvio por qué este tema ha llegado a ser algo importante en Relaciones Internacionales, tocar el tema es esencial en cualquier curso, pero los resultados, los bienes positivos que han llegado de eso son escasos. Pocos gobiernos han reaccionado muy fuertemente, porque la posibilidad de otros tipos de energía, de transporte y todo eso, es muy caro. Entonces, los resultados han sido, de uno a cien, dos o tres... y para mí,eso ha sido falta de imaginación, falta de concentración sobre el tema, falta de convicción de que es un tema importante. Los académicos han concluido que es un tema importante, pero los políticos no.

¿Cómo lo solucionamos, entonces?

En todos los niveles. Las ONG's están trabajando el tema algo, pero sin una colaboración y una convicción a nivel del Estado. El Estado-nación sigue siendo donde la política se hace. No estoy muy entusiasmado con los logros que hemos visto hasta el momento, pero es mejor que nada... algo es algo.

Aterrizando en lo local, como extranjero, ¿cuál es su visión de Chile?

Bueno, esa no es mi área de especialización, así es que mi respuesta vendría de leer La Tercera, El Mercurio, de escuchar la discusión. Yo veo a Chile, no sé como se dice, como en el agua, sin ir ni adelante ni atrás, pero aguardando, casi como flotando... No veo grandes iniciativas, los ministros parecen más interesados en luchar uno contra el otro, yo veo ese equipo de ministros muy débil. Yo veo que la señora Bachelet recibió una educación en Alemania del Este, y tiene que aprender mucho de ahí, y rápido, porque no esta aprobando.

[Fecha de publicación original: 4 de agosto de 2008]

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